ALEJANDRO SABELLA
Un festejo que fue todo un desahogo
"El gol fue un desahogo". Con esta frase que dejó tras el partido, Alejandro Sabella explicó la efusividad del festejo que realizó tras el tanto de Enzo Pérez que le terminó dando la victoria a Estudiantes nada menos que ante Boca. El entrenador albirrojo gritó con fuerza el tanto del mendocino y lo festejó mirando al banco, con los dos puños bien apretados. También se mostró conforme por el rendimiento del equipo y terminó resaltando que una de las claves fue "su juego solidario".
"Así como me pasó ante Independiente cuando el gol del final fue un desahogo... Cuando se merece ganar, por una lado uno está contento por cómo jugó el equipo, pero por otro lado es una especie de frustración porque en el resultado no se ve reflejado el rendimiento superior que se tuvo sobre el rival", admitió Pachorra.
Al DT no lo sorprendió para nada la superioridad que tuvo el Pincha sobre el xeneize a lo largo de los noventa minutos. "Siempre espero que hagan un buen partido. De estos muchachos se puede esperar cualquier cosa dado que hicieron un excelente partido", explicó. Y luego enumeró las claves que tiene este plantel y que lo lleva a obtener buenos resultados: "La base es ser solidarios, entregar todo, correr y jugar en grupo. Estos jugadores tienen mucha técnica, visión de grupo, juego colectivo, que los llevó a hacer un buen partido".
Si bien Estudiantes no dejó de atacar y crear situaciones peligrosas en el arco de Abbondanzieri, Sabella decidió realizar algunas variantes para no perder capacidad ofensiva. Al respecto dijo que "estábamos bien en defensa y no me gustaba quedarme sin posibilidades de atacar. Caldera hacía mucho que no jugaba pero hizo un gran partido. Salgueiro también hizo un gran esfuerzo; la idea era seguir manteniendo jugadores rápidos en ataque para seguir preocupando a Boca y buscar el tercer gol", explicó.
Este nuevo triunfo lo dejó a Estudiantes como único puntero, por eso Sabella reconoció que el deseo es ir despacio, pero también dando pelea hasta el final. "La idea es esa, pero hay equipos que están jugando muy bien, como Bánfield y Argentinos Juniors, equipos que corren mucho, que tienen jugadores rápidos y muy ordenados con los que habrá que tener cuidado".
Por ahora el entrenador albirrojo prefiere no quiere subirse a la euforia que ya tienen los hinchas albirrojos, quienes ayer se volvieron de Quilmes con las gargantas cansadas de tanto cantar y alentar. "Llegar es difícil y mantenerse, más difícil aún. Nosotros tenemos que seguir trabajando como hasta ahora, hacer este juego solidario y de conjunto y después se verán los resultados y ver hasta dónde llegamos".
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